Es un examen que no emite ningún tipo de radiación, obtiene las imágenes del corazón a través de ondas de ultrasonido. Se utiliza un transductor especializado que permite enviar y recibir las ondas a través de los arcos costales para realizar estudios de la morfología del corazón, el ciclo cardíaco en vivo, entre otros.

Se ubica al paciente sobre una camilla y se posiciona para realizar el procedimiento. Se descubre el tórax, se entregará una bata desechable para el uso durante el examen, se aplica gel para facilitar las ondas de ultrasonido. El operador posa el transductor sobre la zona del pecho y las costillas, y lo desplaza para obtener imágenes desde diferentes ángulos. Finalmente, se limpia la zona cubierta de gel, el paciente se puede cubrir la zona y levantarse de la camilla.

El paciente permanece estirado en la camilla como lo indique el especialista, y lo más tranquilo posible. Sin requerirse ningún tipo de preparación especial previa a la realización de la prueba ni acudir en ayunas. El ecocardiograma no es doloroso (puede sentir una ligera presión por el transductor) y no produce ningún efecto secundario.

La prueba suele durar entre 20 y 30 minutos, aunque en ocasiones puede prolongarse.

El paciente podrá hacer vida normal e incorporarse a tus tareas laborales o domésticas diarias.

Sí, el examen no emite radiación por lo que es perfectamente compatible con el embarazo.

Traer orden médica.
Traer exámenes anteriores si posee.
Presentarse 15 minutos antes de la hora de examen.
Traer estudio de electrocardiograma si es que posee.